Enfádate bien
Detectar y manejar tus emociones es la mejor manera de sobrellevar positivamente el día a día. Lo primero que hay que diferenciar es el enfado de la agresividad. Lo más probable es que te enfades todos los días; otra cosa es que lo demuestres o que respondas con agresividad.
Te enfadas cuando te desaparece algún objeto en casa; cuando nuestro compañero de trabajo no te ha pasado un recado; cuando una señora se te cuela en la fila. Todas estas situaciones del día a día sería importante aprender a asimilarlas y resolverlas con asertividad por que a fuerza de acumular tensión puedes estallar en el momento menos oportuno.
El enfado viene cuando te sientes agredido por otro y nuestra emoción e instinto es «defenderte». Pero en el 99% de las situaciones es una distorsión cognitiva la que te lleva a la conclusión de que quieren agredirte. Por ejemplo si conduces; te habrá pasado antes en alguna maniobra extraña de otro; y lo vives así por que no puedes sacar más información que la acción acontecida ;y el instinto que sale es defenderse.
Lo primero es tratar de interpretar correctamente la situación cuando te enfadas antes de responder.¿Y si ese compañero de trabajo que se ríe por lo bajo lo está haciendo de otra cosa y no de tí?. ¿Y si ese señor que no cede el asiento a una señora embarazada en el metro acaba de salir de una sesión de quimioterapia?. Cuando detectas una situación injusta hacia tí tienes que buscar una explicación más lógica a la de que te quieren agredir.
Una vez que has tratado de reflexionar y no encuentras una explicación, es hora de comunicarnos para expresar lo que no nos parece justo o correcto. Cuando no has acumulado ira y empiezas a comunicarte es más sencillo hacerlo con tranquilidad. Piensa que expresarte con diplomacia no te quita contundencia en el mensaje más bien «te la dá». Además el otro recibe el mensaje sin blindarse y está preparado para comunicarse. ¿Cómo te sientes cuando un desconocido te llama la atención de malas maneras? No te centras en el mensaje si no en las formas.
Y el siguiente paso cuando empezamos a expresar lo que no nos gusta es aceptar los mensajes que nos dan a nosotros sobre lo que hacemos mal. Desde pequeño te han enseñado una manera de ver la vida muy parcial. El resto del mundo varía bastante en creencias y costumbres. No existe una sola verdad ni una sola justicia.
Excepto en situaciones de violencia explícita (robos;violaciones etc). la gente que te enfada no lo hace para humillarte o aprovecharse de tí. Lo más probable es que no haya tenido en cuenta tu situación; y hacerselo saber con asertividad le ayudará a mejorar. Pero recuerda que tu aprendas a manejar mejor tus conflictos no quiere decir que los demás lo hagan.